Al Alto de Letras en bicicleta

Fecha: 2017/12/02

Autor: Javier Gonzalez Lizcano
(Director en móvil iD.com)

Esto no pretende ser una guía para los ciclistas en general, pero puede ser de mucha ayuda para aquellos ciclistas aficionados que nunca han hecho este puerto mítico de 80 km. Lo primero que se debe considerar es tener kilómetros acumulados en las piernas: unos seis mil, como mínimo, en el último año. Este saldo en la cuenta de la distancia recorrida en la bici no solo es garantía de resistencia, sino que también le apunta a obtener un grado adecuado de pericia al momento de enfrentar el desafío en la carretera.

Eso sí, ten en cuenta: el ascenso al Alto de Letras es la mítica de las míticas. Puede que hayas realizado el ascenso a Patios, a La Cuchilla, al Alto de Rosas; a Palmas, Peajes, La Unión, en el Oriente Antioqueño; que hayas coronado con éxito la doble a Bolombolo o a La Pintada; la ruta Bucaramanga a Barichara, o de Chía a Tunja, o de Duitama a Sogamoso, o qué se yo, todas estas y otras igual de colosales y encantadoras, Pero… ¡Letras es Letras!

El puerto montañoso, para acometer en bicicleta, más largo del mundo. Aquí la experiencia relevante consiste en ascender desde los 495 msnm hasta los casi 3.700 msnm. Bueno, más información de la altimetría de esta ruta está disponible en Google.

Ahora vamos a nuestra experiencia:

Sí, finalmente nos embarcamos en esta titánica prueba, 14 ciclistas, que conformamos un grupo heterogéneo en edades y profesiones. Nos conocimos por las casualidades de la vida y de las carreteras por donde practicamos el deporte que a todos nos apasiona. Llevamos tres años rodando juntos, especialmente los fines de semana.

Les propuse a mis amigos del equipo realizar una mítica (ruta gloriosa) al Alto de Letras, antes del cierre del año 2017. Para tal efecto, se fijó la fecha dos meses antes del viaje a Mariquita, programado para el viernes primero de diciembre. Allí pernoctaríamos con la idea de madrugar al sábado siguiente para iniciar nuestra hazaña.

Los integrantes del Team Robles tenemos edades que van desde los 35 hasta los 73 años. En el grupo sobresalen algunos muy PRO (término que se refiere a ciclista profesional - o que lo parece). Siempre nos agrupamos en la salida y en las llegadas para disfrutar de las conversaciones, cuyos términos solo aparecen en la jerga de los ciclistas. Eso sí, disfrutando de una buena arepa con mantequilla, con o sin quesito, y la infaltable tasa de chocolate humeante. ¿Y sobre qué asuntos conversamos?: Programación de nuevas rutas, o nuevos uniformes, o lo último en componentes para las bicicletas. Inclusive, conversamos sobre técnicas para la práctica del ciclismo.

Una vez definido el reto, me confirmaron catorce valientes de las bielas. Me cogieron la caña, y, con esto, me pusieron en aprietos.

Mi amigo Oscar Goez, quien ya había realizado este ascenso, me referenció al hombre clave en la logística del evento: un exciclista profesional, transportador, con vehículo (tipo Van) disponible para doce personas. Y, además, con experiencia en acompañamiento a grupos de ciclistas. Este señor resultó ser el campeón de la vuelta a Costa Rica, subcampeón de una vuelta local en España, y corrió al lado de los grandes en Colombia en la década de los noventa. Me refiero a Néstor Freddy Barrera (celular 3165511281) ¡Qué gran tipo! Nos inyectó optimismo, nos asistió en todo momento y maneja de manera impecable. Ah, y siempre muy cuidadoso con las flacas (las bicicletas de ruta).

A paso seguido, ingresé a Google buscando un hotel en la ciudad de Mariquita y encontré el Hotel Boutique (8) 2520872 -3204432479. Me contestó don Juan, y me informó sobre las tarifas y servicios. A decir verdad, nos topamos con un lugar acogedor para descansar y ultimar preparativos para el día siguiente: el de la hazaña.

Durante el viaje, algunos en la van, otros en sus carros particulares, hablábamos y hablábamos de lo que sería el reto a Letras: risas, emociones y chistes, pues, realmente, se pasa divertido con la gente que comparte tu misma pasión.

Antes de llegar al hotel en Mariquita, decidimos bajarnos en Honda y montarnos en las bicicletas para acometer el resto del trayecto estirando piernas. Desde Honda hasta el hotel indicado, se deben recorrer 20 Km muy suaves, pero importantes como precalentamiento para el día siguiente.

Esa noche llovió y tronó, cual película de terror. Noche espantosa que presagiaba nuestro próximo viacrucis sobre las dos ruedas para lo cual ya no había reversa.

Teníamos planeado iniciar nuestro desafío a las 5:00 a.m. de esa mañana sabatina. Pero la lluvia se nos atravesó en nuestros planes. Finalmente, ya desayunados, llenos de ansiedad, y acompañados de una pertinaz llovizna, iniciamos la trepada por la escarpada ruta a las 6:30 a.m.

No habíamos avanzado dos cuadras desde el hotel, cuando se insinuó la pendiente. Primero con un desnivel del 5%, después del 6% - para terminar los primeros 5 km con un promedio cercano al 7,0 %. Estábamos ya en nuestra esencia. ¡Se nos vino Letras!, dijimos.

Sabíamos muy bien que, después de esos cinco primeros km, encontraríamos una pendiente “pedaleable”, en un trayecto de unos 20 km para llegar al municipio de Fresno, Tolima. Aquí había una parada programada, pero, nos sentíamos tan enteros que seguimos de largo, con la mirada fija en las nubes inalcanzables. Continuamos hacia Padua, en un trayecto de unos 15 km, con una pendiente similar a la anterior, para alcanzar los 2.000 msnm. Lejos ya de los 460 msnm de las tibias camas del hotel. El desnivel se incrementa entre 10% y el 11% en los últimos 300 metros antes de llegar a Padua. Nos ilusionamos, porque ya ajustábamos, en este municipio los primeros 40 km del recorrido.

Más adelante alcanzamos un sitio denominado Mesones. Lo recordamos, porque en la ladera de uno de sus cerros se destacaba un aviso: “Artesanía de Colombia”. Algunos recordaron la publicidad de Hollywood o quizá la de la fábrica de Coltejer, en una de las laderas orientales de Medellín.

En nuestras alforjas, ya habíamos acumulado los primeros 50 km del recorrido, distancia para una parada que nos permitiera ingerir algo de alimento. Para los que somos ciclistas aficionados, pero persistentes en el entrenamiento, no es bueno esperar hasta los 70 km de este ascenso, distancia donde ya las piernas empiezan a exigir una parada. Acogiendo además la premisa de que es mejor comer algo antes de sentir la necesidad de hacerlo.

Pero no todos paramos: alguien nos informó que, justo en dos kilómetros adelante de Mesones, se encontraba un reconfortante descenso, exactamente en el km 71 que empezaba justo donde está la virgen. Y, desde el final del descenso, hasta la meta, ya solo restaban 6 km. A falta de este último tramo, ya sobre los 3.700 msnm, se tienen que sacar los últimos restos de energía, de coraje, de fuerza física y mental. Ayuda la emoción que se siente, una emoción indescriptible, que anega de llanto los ojos. Se pasa por la estación de policía, y luego de unos 500 m planos, se llega a las Bodegas de Café de Colombia donde ya se puede exclamar: Gracias, Dios mío, ¡lo hemos logrado!

Finalmente, en medio del frío paramuno, todos nos agrupamos, nos felicitamos y nos fundimos en un abrazo, tal como si estuviésemos celebrando el fin de año. Y a tomar aguapanela, a cambiarnos de ropa y a la van como escolares felices, en el trayecto hacia Manizales.

Asimismo, tuvimos una buena estadía en la bella ciudad de Manizales: el premio al esfuerzo, con un descanso placentero, lo encontramos en el Hotel Benidorm: bien ubicado, moderno y confortable (6) 8905040 y 3013686410. Al final de la tarde, nos dirigimos, en amena caminada, hacia el Centro Comercial Fundadores, en busca de un buen restaurante. Y, luego, para rematar, nos trasladamos a la catedral para degustar una tasa del gustoso café caldense. Manizales, ¡Qué linda tierra, ¡Qué gente sencilla y acogedora!

Comentarios de algunos participantes:

Luis Guillermo Gaviria. "Soy Pensionado y con 73 años. Feliz en la bici, cumplí mi sueño en subir Letras con el equipo que tomó mi alias de El Roble".

Jorge Flórez. "Soy piloto de helicóptero y técnico en mantenimiento de bicicletas. Mi recomendación para el puerto más alto y largo del mundo en bici es: asume el reto con responsabilidad, entrena duro, buena alimentación, hidratación y paso constante..."

Fabio Henao. "Soy ingeniero de sistemas, bicicletero aficionado desde siempre. Hace muchos años detrás de una bicicletiada épica, pensando en Tourmalet, Alpe dhuez y míticas de las grandes europeas".

"Llega la idea y el entusiasmo para hacer el más extenso de los premios de montaña en el mundo: Letras".

"Empiezan a rondar por la cabeza fantasmas y miedos".

"Fue necesario llenar mi mente de confianza".

"Fue necesario asumir el convencimiento de lograrlo".

"Preparación, tips de muchos, repaso de altimetría... en fin, con esa ansiedad de querer controlarlo todo".

"Y llega el día... y como todo en la vida, paso por paso. Pedalazo por pedalazo". "Sólo el convencimiento y las ganas llenaban mi cerebro de fuerza".

"Se requiere más cabeza que piernas".

"Se requiere estar seguro".

"No es fácil... Pero con entrenamiento, convicción y resolución, lo logré:

6 horas 58 minutos".

"No es marca. Pero sí es la mía". "Y hoy estoy muy orgulloso por haberlo logrado".

"Gracias, Robles, por haberme metido en esta locura tan deliciosa".

Luis Guillermo Escobar. "Soy Ingeniero de Geología. Trabajé durante muchos años en Comfama".

"Experiencia: Alto de L E T R A S"

"Todo inició en la mente de un amigo, quien motivó al grupo, coordinó la logística y nunca desfalleció con su idea".

"Catorce amigos nos unimos a ese sueño, pues, seguro, nos despertó el propio".

"Tengo 56 años, llevo 4 años montando en forma recreativa en los alrededores de Medellín y haber tenido esta experiencia ha sido maravilloso".

"Antes de partir, escuchamos comentarios de todo tipo, unos tan pesimistas que lograron que otros amigos no se unieran al programa, y, otros, alentadores, que nos animaron a seguir con el plan".

"El día de la verdad, amaneció lloviendo en la población de Mariquita y lo que pensé que era una dificultad, luego lo entendí como un beneficio, pues uno de los temores era el fuerte calor que haría hasta Fresno".

"Cinco compañeros hicimos un pacto: "Vamos a subir a paso Morrocoy", y así sucedió". "Para mi esa idea fue el éxito, pues siempre me sentí acompañado, nunca pensé en ganarle a otros y menos en el tiempo que haría al final de los 80 km". "En mi mente estaba el objetivo de llegar al alto con mis compañeros".

"Para mí, el éxito de haber logrado llegar al Alto de Letras se basa en: preparación, alimentación y compañía".

Jorge Andrés Villa Ramírez. "Soy administrador de empresas, Financial Planner, gomoso de la cicla desde siempre; ahora, un Roble".

"El pasado 2 de diciembre, pasará a historia como el poder de haber logrado subir el mayor ascenso del mundo en bicicleta "Letras". "No estaba al 100%, pero tenía las ganas, la convicción y la mentalidad para hacerla. "Habían creado falsas o malas expectativas diciendo que era muy dura, lo puede ser, pero no me pareció extrema. De pronto fue porque, gracias a Dios, nos llovió desde el comienzo hasta más allá de Fresno. Cosa distinta hubiera sido con un calor extenuante desde Mariquita".

"Una montada épica que siempre quedará guardada en la memoria y, más aún, en la compañía de los Robles, unos amigazos". Lástima que algunos de los demás Robles no nos pudieron acompañar por sus compromisos o estados de salud".

"Gracias totales...Villa"

Jose Alfredo Villarraga. "Soy profesional en mercadeo. Laboratorios Humax Pharmaceutical". "Mis agradecimientos a todos: a Javier por ese impulso a que hiciéramos esta épica". "Al Roble Mayor por su tenacidad y berraquera, ejemplo para todos". "A Beto, a Andrés, a Hernancho, a Tavo, al doctor Alejo, a Lucho (excelente tu nivel), a Tuco (muy buenos consejos), a Fabio, a Villa, a Mi Coronel (por más que le di, no le pude llegar), a Luisa (qué tesa)". "Mi admiración y respeto para todos" "También muchas gracias a Isaac, a Hernán y a Jaime por el acompañamiento".

Andrés Herrera. "Soy preparador físico, masajista e instructor de bicicleta de Ruta".

"Siempre disfrutando lo que más me gusta". "Hace dos años y medio conocí este hermoso y duro deporte del cual me enamoré a primera vista y, desde entonces, le empecé a meter todo mi empeño y dedicación como nunca lo había hecho con otros deportes". "Haciendo todo tipo de trabajos para lograr este gran objetivo del día sábado 2 de diciembre del 2017". "Con un grupo de amigos que son los que me han dado la gran ayuda y motivación para lograr todo lo que me he propuesto para terminar la prueba de ascenso más larga del mundo es para mí mi mayor alegría en este hermoso deporte". "Sin importar mí tiempo".

"La mítica que me ha dado el resultado de toda una preparación. "Gracias a todo este grupo de guerreros por la gran energía que le ponen a cada pedalazo en el asfalto que nos lleva a rutas encantadoras".

Luisa Escobar Emprendedora FELU P.O.P. "Felicidad, es todo lo que me embarga después de haber logrado la meta de subir a Letras, y ser la única mujer entre tanto hombre, me dio mucha fuerza e incluso sin proponérmelo llegue antes que muchos de ellos; a decir verdad el objetivo era terminarla y nunca pensar si lo haría antes que otros, agradezco a todo el grupo que se portaron como los más caballeros y que siempre me hicieron sentir como una heroína en todo el recorrido."

Nutrición deportiva recomendada:

Kit Actimax. Disponible en www.movilid.com sección nutrición deportiva.

- 1 sobre de Pre Race Actimax (antes de salir).

- 5 sobres de L carnitina Actimax (hidratación durante).

- 2 gel Actimax de 90 gr (te da energía).

- 1 Energy Gel Actimax (para ese último esfuerzo en el ascenso).

- 1 Protein bar Actimax (durante el camino).

- 1 sobre de recovery Pro Actimax (al finalizar la prueba).